Que los vientos os sean favorables, hermanos!
Mi nombre es Skaeyv 'Ska' Sanguinar, y soy la nueva Bruja de El Gran Concilio, tarea que llevaré con gran honor y orgullo. Mi historia es ardua de explicar, trágica y envuelta en sangre.
Mi vida está ligada a la historia de la misma Azeroth, a los designios de Varian Wrynn y sus múltiples viajes por Azeroth. Recogido por unos orcos tras naufragar, Varian pasó a ser propiedad como esclavo del gran Orco y señor feudal de Orgrimmar, Rehgar Earthfury, en cuyo cuativerio conoció a mi madre, Valeera Sanguinar, una elfo de sangre pícara. Aquellos días ocurrieron muchas cosas en Orgrimmar... y antes de una batalla en el círculo carmesí, la desesperanza hizo mella en Valeera y Varian, y por unos minutos fueron amantes, unos minutos en los que veían llegar su última hora.
Al saber que estaba embarazada, Rehgar, el muy fétido, regaló a Valeera a un competidor suyo, separando a Valeera y Varian para muchos años después. Ambos siguieron sus vidas ignorantes de que el otro aún seguía vivo, con lo que la llama del amor duró lo que la brisa tarda en atravesar las Mil Agujas.
Valeera escapó de su nuevo capataz atacandole por la espalda con sigilo, y se dirigió a Elwynn, donde encontró reposo durante varios años en Villanorte. Allí dio a luz a su hija en la calma de las aguas que allí discurrían, a la que puso de nombre Skaeyv, 'Río de sangre' en demoníaco. La sangre de la Alianza y la Horda se unieron en un ser de apariencia humana, y mentalidad tan sangrienta como sus familiares maternos. Ska se hallaba en un punto indefinido entre ambas sangres, entre ambas facciones, inconsciente hasta los diez años de que su padre era el ostentor del trono, Varian Wrynn, que milagrosamente había vuelto de su cautiverio.
Una gélida noche de invierno, una densa bruma cubría las almenaras de la recién reconstruida Ventormenta, y en los callejones de la ciudad se escuchaban unos inquietantes pasos rápidos que parecían dirigirse al barrio de los magos. En las profundas catacumbas bajo la posada del Cordero Degollado, Valeera pidió al Rey Varian que asistiera para hacerle partícipe de una gran verdad que le había sido ocultada desde muchos años atrás. Allí, Valeera descubrio su rostro, trayendo a Varian a un estado catatónico de evocación del pasado.
- Va.... ¿Valeera? ¿Sois vos acaso?
-Hola Varian. Cuanto tiempo, desde Orgrimmar...
-...
-Escucha, vengo a enseñarte algo que deberías conocer... mira...
-¿Quién es esta niña tan tímida? ¡Hola!
-Es tu hija - afirmó Valeera secamente, casi cortante, como solo los elfos de sangre saben ser con los demás seres de Azeroth.
-Esto es imposible. Yo ya tengo un hijo, Anduin. El destino no cuenta con la existencia de esta niña: podría ser horrible para la recién lograda estabilidad de la Alianza, no por reciente, fácil de conseguir. De saber que he estado contigo, Valeera, Darnassus podría renegar de la Alianza, y no puedo permitirlo.
Allí conocí a mi padre, aunque de aquel momento apenas sí conservo el recuerdo del sello estampado en el suelo, de un profundo color violeta, que los brujos utilizaban para invocar criaturas horribles, y el eco de Varian en las catacumbas del Cordero Degollado.... Recuerdo la sorpresa de Varian, mas mi madre no quería que me aceptase como heredera al trono: para Varian sería una vergüenza de cara a su pueblo que se supiese su relación con un ser no de la Alianza: podía suponer una revolución, y recién salidos de la Guerra con Edwinn Van Cleef, una guerra civil no pasaba por sus deseos más inmediatos. Yo pasé a ser un estorbo para Varian y su regencia, y mi madre me envió a Forjaz para protegerme, bajo las enseñanzas del Gran Brujo Alexander Calder, viejo amigo suyo. En las gélidas tierras de los enanos crecí, y un buen día (muy buen día) conocí a Vernom, por entonces, aún conocido como Valthur.
Valthur se apiadó de mi al verme sola en las orillas de Loch Modan, donde una horrible araña no me dejaba hacer misiones. Él acababa de pasar una relación difícil con una elfa de Darnassus. Nos hicimos amigos, y desde entonces, creci con Valthur como compañero en muchas de mis travesías. Fue, sin dudarlo, el paladín más encantador de toda Azeroth - y lo sigue siendo, pues me niego a aceptar su muerte.
Un día decidí contarle a Valthur los secretos de mi ascendencia noble. Él en seguida se dio cuenta de la situación, y me ayudó a superar las penas de mi destierro, acompañándome por toda Azeroth, viéndome crecer. Pero algo no iba bien en Valthur. Se notaba que algo lo atormentaba, y siempre supe que la elfa aún ocupaba sus sueños.
Durante el último Festival de Invierno, me fui a conocer otros mundos, y cuando regresé, Valthur no estaba. No supe qué hacer, hasta que un caballero de la muerte, con su grave voz de ultratumba, me susurró que sabía quien era. Que me conocía, pues era el único recuerdo bonito de su época como humano.
-¿Valthur?
-Valthur murió. Solo vos configurais el recuerdo más bonito de Valthur. Ahora Vernom es su nombre, mi nombre. Mis poderes han crecido, mi vida ha sido sesgada para dar paso a un ser más poderoso, más temido y odiado por toda la Horda.
Él sabía aún el peligro de mi existencia, por lo que ideamos un plan para que todos pensaran que era otra persona: a partir de entonces, mi nombre se reduciría a 'Ska', y para todos los demás seres de Azeroth, seríamos oficialmente hermanos, pues con un nombre no perseguido, y un elemento para despistar como era tener un hermano, me serviría para poder pisar Ventormenta de nuevo. Hoy en día, resido en la taberna de esta bella ciudad, consciente de que sigo siendo, por mucho que lo intente, una bastarda de este reino. Pero como no quiero dominarlo, sino defenderlo, como humana, sigo rindiendo pleitesía a Varian, sin que él sospeche que soy yo. O al menos, de momento no ha dicho nada acerca de mi persona, lo que me da libertad para matar hordas en su nombre y el de la Alianza y la Hermandad.
Ahora intento ayudar a Valthur en su venganza contra el Rey Exánime, pues también es la mía al arrebatarme su amistad. Aún soy joven, pero llegará el día en que el Rey pagará haberme robado a mi mejor amigo.
Esta es la historia de Ska W. Sanguinar
Jue Ene 22, 2009 4:57 pm
