Una historia mas

He querido rescatar esta historia porque me gusto mucho cuando la escribi. Si bien, ha sufrido algunas modificaciones por el cambio de ambiente, la he aplicado a lso tiempos qeu corren.
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A menudo pense... todo mi teson, todo mi esfuerzo.... ¿no serviria para nada?

La brisa de la mañana arrastraba a menudo ese peculiar aroma salado. Si uno se descuidaba podia perder toda una mañana observando el ir y venir de las olas, disfrutar de esa tranquilidad tan absoluta. Lo peor era el frio, pero nada que no se pudiera solucionar con un buen jubon de lana no muy apelmazado.

...estaría tanto tiempo sin disfrutar de una mañana igual...

La camino de la magia es un sendero estraño y muy duro. Obliga a la mente a luchar contra los instintos inherentes de los hombres, aplicar la ilógica en una existencia lógica, pero cuando uno alcanza esa mota de luz en la oscuridad... ZAS!! es algo maravilloso.

El fuego acariciaba las casas mientras dibujaba en el aire hermosas figuras vaporosas, una obra maestra digna del mejor artista de la destruccion. Los gritos de pavor eran la sinfonia perfecta para aquella danza flamigera, y aquellos que aun podian corrrer pronto se encontraban envueltos en redes y atrapados. No muchos vivieron, yo entre ellos, mas no me alegro en exceso

Trabajos inhumanos para la mayoria, forzados a preparara la zona para las siguientes galeras que llegaron en los sucesivos meses. Para mí cautiverio, como unico usuario de la magia, amarrado con cadenas de Vol`taur, para impedir la canalizacion, como si acaso fuera un archimago. Me escupian, apaleaban, e increpaban, aunque todo en su idioma parecia un insulto. Me mostraban mapas y despues me cruzaban la cara, no podian comprender que no entendia nada de lo que me decian.. tan irracionales...

Un dia aparecio en la choza donde me mantenian uno de ellos, mas rudo, mas grande y ,si cabe, mas tosco. Se acerco a mi y agarro con su mano mi menton. Me olisqueo y soltando mi cara con furia me dijo:

- Orthagur: Gggrrr!! Apestas a miedo!!!

Se carcajeo, y señalandome grito algo a mis carceleros, para despues marcharse. Los que me mantenian vigilado se acercaron y comenzaron a retirarme las cadenas.. un error... Zas!!! un destello de luces.. y yo ya no estaba alli...


Corria camino arriba hacia los pastizales perseguido por ocho terribles enemigos, con el corazon saliendoseme del pecho, con una falta clara de aliento y comprendiendo cada vez mejor que no llegaria a la cima... y entonces los vi. ¿Quien no reconoceria aquel blason? ¿Quien no reconoceria el escudo de El Gran Concilio, aquellos que desterraron al vacio al mismisimo Rey Liche?

Terribles llamaradas surgieron de sus manos calcinando al aire a su paso, cubriendo a aquellos desgraciados orcos en un infierno de llamas, propias del mismisimo aberno. La magnificencia de aquel fuego rivalizaba con al vision del sol.... y ni los gritos de dolor pudieron ensombrecer aquel prodigio.

El mas anciano de toda la compañia, pues no sabria determinar la edad de un elfo, tendio su mano y pregunto mi nombre...

"Artie, mi nombre es Artie", conteste mientras asia su mano y levantaba del suelo...

Arkarion: Mi nombre es Arkarion, Guardian del Fuego y defensor de El Gran Concilio, y el dolor de tu pueblo termina aqui...